Micaela

relato real

Micaela se llama la hija más grande de mi hermana, ella tiene 12 años y desde muy chica siempre le decía a mi hermana que veía personas donde no las había; la llevaron a psicólogos, hicieron terapias experimentales, la medicaron, la verdad que vivió un infierno, no sé por qué, pero creo que soy su tío favorito, ella hace un tiempo que solo habla conmigo estas cosas, me cuenta que está cansada de tanto médico, tanta pastilla, y la verdad que yo también.


Hace unos días fui a su casa, me senté a hablar con mi hermana y le dije que ya está bien, que basta de tantas cosas, que es mejor escucharla y cuando ella diga ver algo acompañarla, lamentablemente mi hermana es bastante cerrada a estos temas así que decidió cerrar el tema de la peor manera:


-"ella es mi hija y yo decido que es lo mejor".


Es obvio que contra eso no puedo hacer nada, entonces decidí irme para no terminar peleando, ya que no me gusta estar distanciado de ella.

Cuando salí la vi sentada en el patio, me pareció escucharla hablar, me acerqué, le dije:


-"todo bien Mica"


- "si tío, todo bien" me contestó, me subí al auto y me fui, al llegar a casa le dije a mi hija que la invitará a dormir o pasar unos días, así que mi hija accedió, costó bastante que mi hermana accediera, pero al final lo hizo.


Fuimos a buscarla, su madre la dejo quedarse 3 días en casa, al llegar a casa se fueron a la habitación de mi hija, supongo a hacer cosas de adolescentes, a la noche cenamos, vimos una película, yo me fui a dormir y ellas se quedaron, eran cerca de las 02:00 am que me desperté, fui por un poco de agua, y escuché susurros, la tele estaba apagada, y vi a Micaela sentada sola en el sofá del living.


- "Mica estás despierta a esta hora?, le pregunté


-"no puedo dormir tío, no me dejan" me dijo,


- "¡quien no te deja cuéntame!, si quieres preparo algo para tomar y hablamos",


cuando le dije esto accedió, preparé dos tazas con chocolate y me dijo:


-"es una señora la que veo, ella me dice que no duerma, que quiere hablar conmigo y me dice que no puede entrar al cielo, que quiere que vaya hasta el cementerio, que vamos a poder hablar más tranquilas, yo tengo miedo" y rompió en llanto, decidí no llamar a mi hermana, la acompañe hasta la habitación, ella se acostó.


Alguna vez yo había escuchado que dejar una biblia abierta en algún lado de la casa sirve para espantar espíritus y proteger, así que lo hice, al otro día amanecimos con lluvia, les prepare el desayuno, las desperté, ella me dijo que había dormido superbién, así que me puse contento, desayunamos juntos; ella salió al patio, se sentó en la galería, mi hija me ayudaba a limpiar cuando de repente Micaela entro, me dijo si la dejaba salir a caminar un ratito en la lluvia, que tenía un amigo que era bueno y quería que hicieran eso juntos, pensé que si le hacía bien no habría problemas, ella salió, y le dije


-"hasta la esquina nomás sabes",


-"bueno, tío gracias" me contestó, salió, yo me quedé en el portón viéndola caminar bajo de la lluvia, tenía el brazo extendido como llevando a alguien de la mano, no la iba a juzgar, ella vino a casa a despejarse; pero al pasar por un charco algo llamo mi atención, pude ver en el reflejo del agua que ella no caminaba sola, que realmente alguien la llevaba de la mano….


Hasta el día de hoy Micaela asegura tener encuentros con espíritus, dice que siempre que la buscan quieren algo, que si los ayuda, ellos pueden entrar al cielo y los deja de ver, pero si los ignora la atormentan por las noches y no la dejan en paz.


Y tú… ¿Has ayudado a un ente paranormal a llegar al cielo ¿O al infierno?

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